Diario de un Lunes Santo

Todas las fotos: Daniel Pérez, Paseo Cofrade

Son las 17:00h y acabo de aparcar el coche dos calles más debajo de la Iglesia de San Ildefonso, se nota en el ambiente el bullicio y la alegría que se va a vivir en unos instantes. No es otra Hermandad que la mas torera de toda Almería, ingenuo de mi, por creer que en Almería se pueden ver procesiones donde quieras…….y una mier…….. No había manera de pasar a la C/ Ntra. Sra. de las Mercedes, total que me pongo a esperar justo a la salida de la calle junto a unos contenedores que estropeaban, como no, el momento de gozo y nerviosísimo de la previa a las cofradías.

Total que me pongo a seguir al misterio con su andar de cambios, que tanto lo disfrutan sus devotos. Me encuentro con un grupo de cofrades jóvenes en la venida de Vilches y nos vamos a ver a la Hermandad a la Plaza de San Sebastián. Allí presenciamos la llegada del misterio bien escoltado por sus honorarios Hermanos Mayores, la Policía Nacional de Almería.

Al pasar por la puerta la luz del sol baña por completo este misterio que tallara Luis Gonzales Rey y que para mí es uno de los mejores de Almería sin duda. Espero a ver pasar la Esperanza Macarena, con su elegante banda detrás, de las mejores que visitan Almería, y un andar de la Esperanza Macarena, que a mí no me recordaba a nuestra Esperanza Macarena de otros tiempos.

Acto seguido me voy para el Zapillo a ver salir al Gran Poder, como de costumbre llego ya tarde y la Hermandad está saliendo a la Avenida de Cabo de Gata. Allí coincido con José Manuel, y seguimos un poco a esta Hermandad hasta que hacen su parada para refrescarse un poco en la Floristería que hay en esta Avenida. Una pena que esas túnicas no salgan de una iglesia del Centro y recorran con tranquilidad las céntricas calles de nuestra ciudad, para poder mantener bien el cortejo, sin necesidad de ir corriendo, porque yo sé lo que es salir desde mucha distancia, pero con música, así es que sin ella tiene que ser peor aun.

Me gusta el paso del Señor y los faroles cuando esté terminado va a ser una gran obra.

Solo me queda ya por ver a Pasión, pero tengo que ir a recoger a la niña de mis ojos y se me vuelve a hacer tarde, así que nos vamos directamente para la C/ Cruces, al pasar por la puerta de la Iglesia ya había gente allí esperando y vi a algunos nazarenos que dejaban sus túnicas. Cosa que me extraño al ver que aun no estaba la Hermandad ni en la Avn, pero vamos eso es algo que no me compete a mí. Cogemos un sitio antes de la salida de la C/ Cruces y vemos pasar al misterio de la Sentencia, con un compas abierto y con cambios toreros, que ya están en casa y hasta el año que viene tendrán que esperar para disfrutar bajo su Cristo.

Detrás la Esperanza Macarena, con una bulla un tanto ordinaria, protagonizada por un grupo de 6 o 7 niñas, que ni les va ni les viene esto. Por suerte pillamos un sitio un poco mas debajo de donde vimos al misterio, y pudimos observar lo bien vestida que iba en su día de pasearse por las calles almerienses. Manolo espero que disfrutaras debajo de tu Macarena.

Tras ver la Hdad. De la Macarena nos vamos corriendo a ver a Pasión, que no me puedo quedar sin verla. Con suerte aparco cerquita y escucho a la Agrupación saliendo de Obispo Orbera para entrar en la calle del Celia Viñas, que no me acuerdo del nombre. Un pelotazo de Agrupación musical y ante mí una Hermandad joven, pero a la vez muy rica en enseres, pasos y modales. Es raro ver a una Hermandad a la vuelta bien organizada, y esta por lo menos en ese punto lo era. Una obra la del Señor, de escándalo, un encanto y una delicia.

A lo lejos se empieza a ver el maravilloso frontal bordado de los Desamparados, que joya de paso va a ser cuando esté terminado. Un andar que superaba el que había tenido este paso en años anteriores.

La Hermandad sigue su camino y nosotros decidimos ir a ver la entrada del Gran Poder, que aun tenía que estar en la calle. Así que nada allí que me planto con Gema y en la puerta me encuentro con David, Maite, Rubén, María y Antonio Toro. Rato de charla hasta que paso delante nuestra el paso del Gran Poder, bien acompañado por la gente de su barrio, y desde luego afluencia de gente en la puerta, yo no me imaginaba aquello.

Entra con sus dificultades, por la puerta tan pequeña que tiene esta iglesia, y ya está. Un año más se me ha ido el Lunes Santo y casi ni me he enterado. Mañana a levantarme bien nervioso y a darle un buen paseo a los Titulares de la Coronación.

Buenas noches.